Los vietnamitas no compran abetos por Navidad para colgar regalos o bolas. Tienen su propio árbol navideño: el melocotonero. Creen que el melocotonero ahuyenta los malos espíritus y, en una semana en la que se han quedado sin la protección del dios de la cocina, cualquier ayuda es buena. Por lo que nos contaban el otro día, es un árbol fundamental en la cultura vietnamita, ya que, según su creencia, el Paraíso -no sé cómo lo llaman exactamente- está repleto de melocotoneros en flor. Así que supongo que habrá muchas metáforas y referencias literarias a ese árbol.
No hay comentarios:
Publicar un comentario